Que Internet y las redes sociales van demasiado rápido es una realidad que no se nos escapa a nadie, y menos a los que trabajamos a diario online. Vamos a tratar de resumiros la visión general del estado de las redes sociales a día de hoy.
Las últimas noticias apuntan a que los cambios van a llegar a Facebook, Instagram y Twitter, por lo que debemos aprender a adaptarnos a cada modificación.
Los últimos datos que llegan de Estados Unidos, el laboratorio de tendencias también en este campo, apuntan a la progresiva decadencia de Facebook. El gigante de las redes sociales va perdiendo el cariño de los usuarios jóvenes que ven demasiados mensajes políticos y publicitarios que dan paso a un sentimiento de «toxicidad». Mientras, se están “mudando” poco a poco a Snapchat e Instagram. Y Facebook mientras se las arregla para mantener el interés con nuevas características implementadas que tratan de emular a Snapchat.
Al igual que con Facebook, Twitter no mantiene sus mejores resultados: pérdidas financieras y crecimiento insignificante en su uso. De hecho, el número de usuarios se ha estancado con solo un 4% más de usuarios en 2016. Otro problema son las cifras que apuntan a que hay 48 millones de cuentas de Twitter que en realidad son robots, lo que representan el 15% del total de usuarios.
Por otra parte, Instagram cada vez está más centrada en desarrollar perfiles de negocios. Estas características especiales para ir más allá en cualquier tipo de negocio se presentarán esta semana, por lo que habrá que estar atentos por si la cosa va más allá, como se espera, de la creación de una funcionalidad para las reservas.
La red social del pequeño fantasma, Snapchat, es la red social con más crecimiento en este momento. Actualmente se prepara además para su salida a bolsa con unos datos que cuanto menos llaman a reflexionar sobre cómo plantear una estrategia en esta red. Tiene 158 millones de usuarios activos al día, incluyendo 52 millones en Europa.
La conclusión es que habrá que plantearse cómo enfrentarse a nuevos retos y nuevas realidades en un no muy largo lapso de tiempo.
