La automatización de ciertas tareas en las redes sociales se ha convertido en una necesidad para los administradores de comunidades. Se puede automatizar muchas cosas para ayudar a ahorrar tiempo, pero no si se desea crear una interactividad real con nuestra comunidad.
La razón principal para la automatización es facilitar acciones recurrentes que hacemos todos los días. Aunque muchos crean que la tarea de un community manager es muy fácil, la verdad es que se requiere mucho tiempo para que las acciones que se emprenden en las redes estén optimizadas: seleccionar informaciones llamativas, presentarlas de forma atractiva, hashtags pertinentes… La automatización permite al administrador de la comunidad ganar tiempo en acciones de bajo valor añadido, que puede centrarse en que en vez da un valor añadido.
Pero tiene un “pero”: la interacción debe seguir siendo humana. De hecho, ya se ha demostrado que los robots utilizados por grandes empresas para responder a los problemas, son totalmente ineficaces.
Resumiendo, podemos establecer una lista de pros y contras de automatizar la presencia en redes sociales:
Ventajas:
Las ventajas son el ahorro de tiempo en esas acciones recurrentes diarias gracias a herramientas como Buffer, Hootsuite o Tweetdeck…
Estas herramientas tienen la misma característica básica: programar las publicaciones por fechas y horas.
Otra ventaja del uso de herramientas de automatización es reunir estadísticas sobre el engagement y mejores tiempos de publicación de las redes sociales. El uso de un acortador de enlaces ofrece datos más detallados sobre las interacciones con su contenido.
Inconvenientes:
El principal es superar los límites razonables de la automatización; es decir, olvidarse de la interacción y de que es la principal fórmula de obtener el compromiso de la comunidad. Algunas cuentas parecen que carecen de la intervención humana…
Algunos incluso añaden respuestas robotizadas para las menciones. Y mucha automatización lo que provoca es un total descrédito de los usuarios.
En conclusión, lo ideal es tirar de cronograma de publicaciones que se pueda automatizar a través de herramientas y usar las estadísticas que nos aporten (mejores horas, compromiso que generan los mensajes…) para intensificar nuestra presencia en esos momentos e interactuar siempre de forma manual.
