Según el estudio sobre el uso del móvil en 2017 de ComScore, las aplicaciones móviles representan el 57 por ciento de todo el uso de medios digitales, y las aplicaciones de los teléfonos inteligentes suponen más de la mitad del tiempo de consumo de los usuarios.
¿Por qué las aplicaciones se han convertido en una fuerza tan poderosa en nuestra vida diaria? El poder del hábito. El informe de uso de aplicaciones móviles en 2017 de ComScore explora la dinámica del consumo de medios móviles, los públicos y los hábitos de los usuarios para comprender lo que está impulsando esta actividad, cómo ha evolucionado y cómo pueden aprovecharlo los editores y los anunciantes.
Algunas de las conclusiones más interesantes del estudio señalan que el móvil representa dos tercios de nuestro consumo digital. El escritorio representa sólo el 34% de este tiempo, aunque por edades aún se pueden observar diferencias: sólo los mayores de 65 años pasan la mayor parte de su tiempo en el escritorio. Por el contrario, los jóvenes entre 18-24 pasan menos de un cuarto de su tiempo en un ordenador.
El mundo de aplicaciones (87%) sigue dominando a la navegación web (13%) y eso que cuando una persona usa su teléfono inteligente por primera vez, descarga las aplicaciones que necesita. Y después, nada: el 51% de los propietarios de smartphones no descargaron ninguna aplicación durante más de un mes y sólo el 25% descargó tres o más aplicaciones.
También señala el informe que los usuarios más jóvenes descargan más aplicaciones pagando: el 19% compró 12 aplicaciones en los últimos 12 meses, en comparación con sólo el 3% de los usuarios de entre 35-54 años y el 1% de los de 55 años o más.
En términos de tasas de penetración, Facebook, YouTube y Facebook Messenger son las aplicaciones más populares, por delante de Google Search y Google Maps.
Finalmente, el estudio muestra cómo los usuarios tienen sus teléfonos. Por ejemplo, el 39% de los mayores de 55 años aún usan sus teléfonos inteligentes con las dos manos, en comparación con sólo el 8% de los menores de 35 años. Los más jóvenes tienden a colocar las aplicaciones en sus pantallas para que puedan llegar fácilmente con el pulgar. Y aporta un dato a tener en cuenta para la ergonomía: los usuarios serán más proclives a utilizar una funcionalidad en una aplicación si ésta se coloca en la parte inferior derecha.
Accede al Estudio sobre el uso del móvil en 2017.
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